Y fui feliz a su lado,
muy feliz...
muy feliz...
aun sabiendo lo que venía arrastrando,
ese
presente que fue pasado
y que aún en el futuro podría seguir,
ligado a los miedos de un misterio,
pero de
todas formas,
yo fui feliz.
Fui feliz a su lado...
aun cuando mis pupilas se cristalizaron
por tanto extrañarle,
navegando en sus órbitas,
ciegamente amándole
y dejándome...
dejándome,
yo fui feliz.
yo fui feliz.
Fui feliz a su lado,
tan feliz...
tan feliz...
aun cuando me conformaba
con la inestabilidad,
en medio de despedidas
y reencuentros,
y reencuentros,
en medio de los te odio
y los te quiero,
y los te quiero,
en tantos medios,
yo fui feliz.
yo fui feliz.
Fui tan feliz,
torpemente feliz...
torpemente feliz...
aun cuando le esperé tanto,
sin cargas,
sin cargas,
sin culpas,
sin deseos de huir,
sin deseos de huir,
con mis alas heridas,
le esperé a que llegase a nunca marcharse
le esperé a que llegase a nunca marcharse
como solía hacer.
Y esperándole fui feliz...
De no ser por aquellas ocasiones en las que suelo respirar podría prometer que jamas fui feliz contigo.
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