El Oh!racio

IV

No puedo,
¿Cómo sanar el árbol tallado?
¿Cómo negar las letras, marcadas con esa navaja

que también sueles usar para lastimarte? 

No puedo.

Hay perfumes prohibidos, ¿sabías? 

Hoy llevo uno en mi memoria.

Olvídalo,
¿Para qué guardar en la retina el efecto de esa luz?
¿Para qué?
Si hubieron cosas más tristes ayer.

By: El del cigarrillo cualquiera, con la pulsera cualquiera. 

Noche LXXV

Tu mano con tinta.

Ha regresado mi búsqueda sobre tu pecho;
la voz que pronunciaba mi nombre,
ha dado tantas vueltas el viento
que me parece extraño que duelas,
ha mirado la agonía tantas veces mis ojos
que creo tu sonrisa es lo único mas cercano a la vida,
ha sido cobarde la pena
que imagino a la valentía escondida entre tus cuerdas,
ha recorrido mi memoria tu lejanía
que solo me queda la foto de tu mano con tinta,
las de tu guitarra
y las de tu rostro cansado pero sonriendo para mí,
ha revuelto mis tripas la música
que solo tarareo tus impro,
han llegado las noches con verbos nuevos;
versos viejos sin firma
que solo me siento a escribir.

Nota: Disculpas eternas por la foto.

The blues ❤

Los jueves eran eternos,

y las canciones que se hicieron para soñar
salían de tus manos... 

ya lo sé,
sigo escribiendo en un pretérito agonizante
que a paso lento pide que no me vaya.

Sigue aquí,
en lo que alguna vez creaste
sin pedir permiso,
de lo que se llenaban las pupilas
para encender las ciudades,
en lo insólito que nos golpeaba una
y otra vez cuando llegábamos
al mismo lugar...
nuestro hogar.

Todo me sonaba a poesía muerta 

hasta que empezabas a cantar,
todo era real mentira 

hasta que me mirabas con ojos nostálgicos de arcángel ,
las horas se extendían como el blues
y mi cuerpo caía. 

¿Dónde estaba la felicidad en aquellos días?
escondida en un baúl 

debajo de tus costillas... 

sin embargo,
nos embelesábamos al son del tiempo
y sonreíamos... 

como el blues que se extendía.

photo: @josyanapc

Sobre la tristeza...

Hoy tengo ganas de escribir sobre su cuerpo,

versos tristes como la vida 

que se esconde en sus pupilas, 

mejillas con rimel  

que describen la  guerra de la noche anterior.

Luz... 

¿por qué te posas sobre sus pies?

Sus lunares;
mi universo.

Su risa;
mi tormento.

Sus lágrimas
que me dan la esperanza
de seguir viéndola con vida.

Su voz,
la muerte.

Hoy quiero escribir 

sobre su cuerpo versos tristes,
dibujarle en el pecho un arco iris,
en sus senos... 

dos soles,
que la lluvia reine orgullosa cuando me mire...
las tormentas.

Hoy quiero escribir 

sobre su cuerpo versos tristes;
pero no se puede escribir en la piel de la tristeza.

photo: @josyanapc
El Universo en su piel...